• Reducción de la factura de la luz gracias a la optimización dinámica de las tarifas.
  • Mayores ingresos por servicios de red y comercio de energía.
  • Mejor aprovechamiento de la energía solar autoproducida.
  • Control automatizado sin intervención manual.
  • Mejora de la estabilidad y la eficiencia del sistema eléctrico local.